≫ Plantas tóxicas para nuestro caballo
En el post de esta semana de nuestro ‘Blog De Raza’ hacemos un repaso por algunas plantas que pueden resultar tóxicas y muy dañinas para la salud de nuestro caballo en caso de ingestión.
Tejo
El árbol conocido como tejo común o tejo negro, así como sus frutos, presenta una toxicidad que ha llevado a muchos ganaderos a talar estos árboles. Con muy poca cantidad, puede provocar la muerte de nuestro animal. Como ejemplo: un caballo puede morir si ingiere entre 100 y 200 gramos de esta planta.
Hierba de Santiago
Tiene un aspecto atractivo, pero su gusto amargo hace que los caballos la desechen de su dieta. El peligro radia en que el caballo la coma mezclada con el forraje. Entre otras enfermedades que puede desarrollar el caballo por la ingesta de la hierba de Santiago se encuentra la cirrosis hepática.
Adelfa o Laurel en flor
La adelfa puede llegar a provocar la parada cardíaca del animal. Para llegar al punto de intoxicación no es necesario ingerir una gran cantidad de esta planta. Aunque como punto a favor, es que tiene un sabor muy desagradable para el equino. Debemos cuidar que no esté presente mezclada con el forraje.
Centauria
Es una de las plantas más dañinas y la intoxicación se produce principalmente cuando los caballos se encuentran en prados pequeños y escasos de comida. A dosis elevadas puede provocar disfunción facial y en los músculos y nervios de la boca y garganta.
A esta intoxicacion se la denomina " La enfermedad de la masticación" ya que el caballo puede masticar pero no salivar, con los consiguientes problemas en el proceso digestivo.
Los primeros síntomas hacen parecer que el caballo está "sonriendo", puede tener la lengua colgando y suele sacudir la cabeza. Al intentar beber, llegará a meter los belfos y ollares en el agua. En fases más avanzadas, el caballo entrará en letargo, pérdida de apetito, deshidratación, dificultad para respirar, temblores musculares e incoordinación.
No tiene tratamiento y la evolución de la enfermedad es irreversible.
Rododendro
Este típico arbusto de hoja perenne, es otra de las plantas tóxicas que pueden afectar a nuestro caballo. La toxina del rododendro también puede provocar la muerte del animal y de forma muy rápida, sólo unas horas más tarde de haber sido ingerida.
Helecho Macho
El helecho es una planta tóxica que resulta muy agradable al paladar de los caballos, por lo que hay que ser especialmente cuidadoso. Entre los problemas que puede provocar está la de destruir la Vitamina B del animal, con las graves consecuencias que causa.
Zuzón
También conocida como Senecio Jacobea y muy común en los prados, su veneno puede destruir el hígado del caballo, por lo que es nuestra responsabilidad estar atentos ante la presencia de esta planta.
Dedalera
Conocida también como chupamieles, esta planta cuya flor es de color rosa y de un color muy vistoso tiene una toxina que es especialmente dañina para el caballo. Entre otros efectos en el animal la dedalera puede producir cólicos o enteritis, llegando incluso a provocarle la muerte.
Serpentaria blanca
Caracterizada por sus pequeñas flores de color blanco, es otra planta que nuestro caballo debe evitar. Puede producir depresión y debilidad en nuestro animal, además de poder sufrir un fallo cardiaco o del hígado, con la posibilidad de morir en poco más de una semana.
Laurel
Muy toxica para el caballo, su intoxicación provoca diarreas y termina afectando al corazón llegando a producir la muerte del animal.
¿Y cómo evitar su consumo?
Las plantas que hemos enumerado en el artículo podría ser mucho más amplio, por lo que debemos poner en marcha todo tipo de medidas para que nuestro caballo no las ingiera nunca.
En este sentido, os podemos dar varios consejos para que nuestro caballo evite ingerir plantas tóxicas.
Por ejemplo, si contamos con un extenso prado por el cual se mueve el animal y come, debemos de analizar cada uno de los árboles que estén presentes. En especial, las bayas de los mismos y asegurarnos de que tipo son y cómo son sus frutos para saber si pueden ser venenosos.
En el caso de que sus plantas o frutos sean tóxicos, podemos optar por controlar que los caballos no se acerquen a esa zona e, incluso, talar dichos árboles.
Y también deberemos de revisar el forraje que sirve de alimento a nuestro caballo, puesto que muchas plantas secas se pueden mezclar en su elaboración. La confianza en los proveedores de forraje debe de ser 100% para poder cuidar la salud de nuestro equino.
Esperamos que este artículo os haya resultado interesante, y ya sabéis que si tenéis alguna consulta, estamos a vuestra disposición en nuestra tienda de Collado Villalba (Madrid), en Facebook y en el email: deraza@tiendahipicaderaza.es